Correr para bajar de peso: cómo Christian perdió 80 kg

Hace tan solo siete años Christian no hubiera imaginado poder correr una maratón ni ser considerado un deportista dedicado. El camino hacia una vida más saludable y activa no es siempre fácil. Pero Christian lo consiguió y nos cuenta cómo.
“Ahora me siento a gusto conmigo mismo”
Ya de pequeño era más bien regordete y con los años no paré de ganar peso: en 2015 alcancé los 180 kg. En ese momento, mi hijo tenía cuatro años. Él fue una de las razones por las que decidí actuar: no quería que se avergonzara de mi. Además, quería ser un buen ejemplo para él.
“Me quedaba sin aliento al subir tres escalones”
Sé por propia experiencia que perder peso es especialmente difícil al principio. Un cambio en la dieta y la integración del deporte en mi día a día fueron verdaderos retos para mí. Los primeros resultados visibles y el hecho de sentirme genial me motivaron a seguir adelante. Ahora, el deporte se ha vuelto algo indispensable, ya no me puedo imaginar mi vida sin movimiento. Estoy especialmente orgulloso de haber participado en una carrera infantil con mi hijo de ocho años, y él lo pasó genial.
“Estar en forma no es un objetivo, es un estilo de vida”
Cuando decidí adelgazar, empecé saliendo a caminar. Y con el tiempo, estos paseos se volvieron más largos y rápidos. Hasta que empecé a correr. Este tipo de ejercicio y sus efectos positivos en mi salud me gustaron tanto, que me centré en correr y subí el listón de mis objetivos:
- En 2016, logré correr 10 km sin parar.
- Medio año después pude correr mi primera media maratón.
- Después de entrenar muy duro, cumplí otro de mis sueños: correr en la Maratón de Berlín.
“Nada cambia hasta que tú cambias. Y de repente todo cambia”
Cuando alguien decide perder peso, depende en gran medida de su alrededor. Yo tuve la suerte de que mi estilo de vida fue recibido con buenos ojos. Quizás alguien pensó en secreto que no lo conseguiría, pero a esta gente en especial les he demostrado que el cambio es posible y que el esfuerzo vale la pena. El deporte ha dejado de ser una carga pesada – ahora me encanta moverme e incluso muchos de mis amigos han empezado a correr y me piden consejo.
“Con esfuerzo y dedicación, todos podemos conseguir grandes cosas”
El running me ha cambiado la vida. Hoy, con 80 kg menos, entreno cada día y combino entrenamientos de fuerza y de resistencia. Me han ayudado y motivado mucho los consejos del blog y los ejercicios y planes de entrenamiento en las apps adidas Training y adidas Running.
Ver y sentir el progreso día a día es una sensación maravillosa que no me quiero perder. También he aprendido que no solo tenemos que dejarnos llevar por la ambición, también es muy importante escuchar el cuerpo. Debido a mi entusiasmo y motivación me lesioné por sobrecarga, por lo que tuve que renunciar a una maratón en 2018 en la que había planeado participar. Fue un pequeño contratiempo que me enseñó que siempre debo escuchar mi cuerpo y que no debo rendirme.
Perdí los primeros 75 kg entre la primavera de 2015 y el verano de 2016. Después, mi progreso se estancó hasta la primavera de 2020. En ese momento, volví a ganar peso hasta alcanzar los 125 kg hasta las navidades de 2020. Fui víctima del famoso efecto yoyó debido al estrés producido por el desgaste profesional: había vuelto a ganar 20 kg. Conseguí remontar en primavera de 2021, volviendo a perder no solamente los 20 kg que había recuperado, también perdí 5 kg extra. En total, perdí 80 kg desde el principio de mi viaje de fitness y conseguí alcanzar el número mágico: los 100 kg.
Ahora peso 100 kg y me siento mucho más saludable y seguro conmigo mismo. Sin perseverancia y disciplina no lo hubiera conseguido.
¡A todas estas personas que quieran llevar a cabo un gran cambio como este, les aconsejo que empiecen despacio y que no se rindan nunca! “El milagro no es que logré terminar. El milagro es que tuve el valor de empezar.” El primer paso siempre es el más difícil, pero también es el más importante. Solo las personas que se atreven a darlo llegarán a la meta.
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