Motivación fitness • Puedo con todo

por Monika Dauterive

People and Culture Manager, Recursos Humanos en Runtastic

Siempre he tenido una relación complicada con el deporte. He pasado por temporadas en las que hacía mucho deporte y por periodos en los que no me apetecía nada moverme. A veces, todo lo que quería era practicar deportes en equipo, pero otras veces prefería entrenar sola. Sea como sea, el deporte siempre ha sido parte de mi vida – tanto en las buenas como en las malas.

En 2017, mi motivación para entrenar tocó fondo cuando me rompí el ligamento anterior cruzado (LAC). En tan solo unos meses, gané peso y llegué al peor estado de forma física de mi vida. Y cuando por fin había empezado a amar mi cuerpo, me sentía de todo menos en forma.

Cómo conseguí motivación

Después de una pausa de seis meses sin entrenar, empecé a correr otra vez en enero de 2018. Aguantaba unos dos o tres kilómetros a un ritmo de 8:00 min/km.

Mi objetivo era hacer tres actividades de fitness a la semana, así que empecé el plan de entrenamiento “Transformación total” de nuestra app adidas Training. En ese momento estaba en un nivel de forma física más bajo de lo que había estado nunca, así que me conformaba con hacer dos entrenamientos por semana. En otras palabras: me llevó unas 20 semanas completar el plan de entrenamiento de 12 semanas. 

Soy muy crítica conmigo misma, por eso, me serví de las redes sociales para aumentar mi confianza y autoestima. Cada vez que compartía una sesión de running o un entrenamiento en la app, recibía apoyo de mis amigos; cada vez que pasaba por un mal momento, alguien conseguía levantarme los ánimos y me motivaba a seguir. Cada vez que hacía un entrenamiento o salía a correr en grupo, el hecho de chocar las manos con los compañeros al final de la sesión me hacía sentir orgullosa de haber aguantado hasta el final y me mantenía motivada.

“Soy muy crítica conmigo misma.”

Recuperando mi cuerpo 

Ocho meses después de empezar con mi nueva rutina de fitness, mi vida cambió por completo cuando mi marido y yo decidimos separarnos. Durante seis meses, el equilibrio entre vida laboral y personal fue un desastre, casi no dormía porque prefería salir de fiesta, además mi dieta era… bueno… digamos que no era mi prioridad. Perdí bastante peso rápidamente (pero no de forma controlada ni consistente), y mi ritmo en running era una locura (tratándose de mí). Pero me sentía débil, cansada y… no tan sensual como antes.

Así es como conseguí motivación para volver a entrenar. En seguida noté como mis brazos ganaron firmeza, mi trasero ganó volumen, mis piernas se fortalecieron y mi cintura se estrechó. Empecé a hacer entre tres y cuatro entrenamientos a la semana; a veces, incluso salía a correr y hacía un entrenamiento de fuerza el mismo día. Para mí, esto era (y sigue siendo) espectacular. Ver los resultados de mis esfuerzos es una gran recompensa.

Me encanta cómo me siento 

A pesar de volver a ganar peso en los meses siguientes (cuando empecé a comer otra vez o a satisfacer mis antojos de dulce), me sentía genial. Y me sigo sintiendo así. Mantengo una relación distante pero amistosa con mi báscula y no me echo las manos a la cabeza cuando veo pequeños cambios en mi peso. Normalmente, cuando me miro en el espejo o miro fotos mías, me gusta lo que veo.

No suelo ser perezosa, pero a menudo me siento tentada a saltarme algunos días de entrenamiento. Cuanto más larga es la pausa, más me cuesta volver a conseguir la motivación suficiente para entrenar. A veces, me siento frustrada cuando corro más despacio que la semana anterior, o cuando no puedo hacer tantas flexiones como creía.

“Es frustrante perder músculo más rápido de lo que tardo en ganarlo; esto es lo que me motiva a seguir.” 

Por fin he llegado al punto en el que mi cuerpo puede volver a ganar músculo más rápido después de una pausa y en el que echo de menos entrenar después de uno o dos días sin hacerlo. Me encanta respirar el aire fresco cuando salgo a correr por la orilla del lago y me encanta notar las gotas de sudor después de una ronda de burpees (mucho más que lo que me gustan los burpees mismos, si os soy sincera). Me encanta poder coger a mis hijos en brazos y poder andar durante horas sin cansarme. Me encanta sentirme en forma, saludable y feliz con mi cuerpo. Me encanta sentir que puedo con todo.

Sobre Monika 

Monika es una parte vital del equipo de Recursos Humanos de Runtastic y una potente embajadora de los valores de nuestra empresa. Como madre de dos hijos, intenta ser un modelo a seguir para sus niños enseñándoles a estar contentos con lo que tienen y a no ser demasiado exigentes con si mismos.

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